No fuimos ángeles… tampoco demonios, solo pasajeros de un tiempo desconocido

Por Ricardo Bustos

A pesar de todo lo que pudimos experimentar de dolor, a quienes fuimos viajeros de mi generación, nadie nos va a quitar el privilegio de haber sido contemporáneos activos o testigos de las Damas y Caballeros que produjeron los mejores descubrimientos en todo sentido, desde nuestra niñez hasta la actualidad.

Hemos vivido junto a los grandes Intelectuales y Científicos, Médicos que abrieron caminos y dejaron huellas, Cantantes de todos los ritmos y voces de todos los géneros, teatro del mejor con autores que pintaban la realidad del mundo en cada época, actores de calidad irrepetible que nos hicieron llorar y reír en una misma obra, película o teleteatro.

Escritoras que trascendieron al género, Escritores traducidos a varios idiomas, Dibujantes, Pintores, Arquitectos, Ingenieros, Modistas y Diseñadores de Moda, con trascendencia internacional. Ingenieros Aeronáuticos y Marinos, genios del mundo motor automovilístico.

Tan rica ha sido la época que me tocó vivir en tan poco tiempo, porque la vida misma es un suspiro. El siglo XX trajo guerras, pestes, cataclismos, inundaciones, sequías, pero también los mayores descubrimientos de la historia hasta hoy.

La Medicina, junto a la tecnología, formaron una dupla que dió comienzo a una nueva etapa para salvar vidas con nuevos y asombrosos avances en el conocimiento de nuevas posibilidades gracias a la Ciencia.

El satélite nos permitió estar conectados en tiempo actual, directo, con cualquier habitante en otro extremo del planeta y con una calidad de audio y vídeo de excelencia. Los celulares, la computadora fija o portátil, los televisores planos, el aire acondicionado y la vedette del progreso, porque sin Ella nada sería posible de todos los adelantos que hemos tenido…. La «Energía Eléctrica»… Esa fuerza invisible que enciende cada día nuestras vidas.

Nuestra mente trabaja buscando nuevas emociones, pero nuestro cerebro solo es utilizado en un 7 % de su capacidad productiva.

Así mismo, hemos logrado conectarnos entre los continentes con aviones que nos llevan desde el hemisferio norte al sur sentados a 10,000 metros de altura, milagros de una nueva era con nosotros, los pasajeros que iremos bajando en las Estaciones próximas, para que otros viajeros de esta nuestra casa, llamada tierra, sigan disfrutando y descubriendo para asombro de la humanidad, nuevas formas de vida, ojalá con otros seres, que no tengo dudas, existen en el universo… no podemos ser tan egoístas y creer que somos los únicos en medio de semejante belleza astral.

«Es posible que el cosmos esté poblado con seres inteligentes. Pero la lección darwiniana es clara: No habrá humanos en otros lugares. Solamente aquí. Sólo en este pequeño planeta. Somos no sólo una especie en peligro sino una especie rara.

En la perspectiva cósmica cada uno de nosotros es precioso. Si alguien está en desacuerdo contigo, déjalo vivir.

«No encontrarás a nadie parecido en cien mil millones de galaxias»;

«La ciencia es más que un simple conjunto de conocimientos: es una manera de pensar»;

«La primera gran virtud del hombre fue la duda, y el primer gran defecto la fe»;

«La Tierra es un lugar más bello para nuestros ojos que cualquiera que conozcamos», (Carl Sagán).

El autor es: Locutor Nacional-Comunicador
Capiovi, Misiones, Argentina
DNI 7788556

*

Leave a Comment

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.