Oh, silencio, por qué te fuiste, viejo amigo

Oh, silencio, por qué te fuiste, viejo amigo

Por Rafael Chaljub Mejía Yo disfruté del privilegio del silencio. No hago culto al estancamiento y el atraso, ni oposición a los cambios progresistas con su carga de beneficios para la humanidad. Pero, ante el estruendo pertubador que a nombre del progreso y la libertad nos ha invadido, tengo pleno derecho a añorar aquel silencio denso y acogedor del que gocé en los primeros tiempos de mi vida, allá por los años viejos. Donde empecé…

Leer más