Por Juan Tomás Valenzuela Lo que aquí “necesitano”, e’j un hombre como Antonio, un guaguero dei demonio come mieida y maca… Un hombre dei pueblo llano, que no le teme ai trabajo, que ha hecho dei bajo a grajo su má sublime etandaite, de la corrupción un aite y dei tranpoite un relajo. Necesitamos a Antonio, o ai amigo Juan Hubiere, aunque con éto se fuere todo ei progreso ai demonio. Yo mimo doy tetimonio…

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