Este problema haitiano si esta complicado; Vídeo

Por: Sandino Bisonó.

Ay Dios!

Por eso estamos como estamos, con los haitianos más arriba del moño. Dominicanos inconscientes apoyan a los ilegales disque por un motivo humano y de justicia, pero no ven la realidad de lo que esta pasando con esa situación.

Nosotros, los dominicanos, no podemos apadrinar eso, no podemos permitir que se repita la historia, nos dominaron por la fuerza durante 22 años, pero el dominicano de aquella época fue más consciente y más agresivo para defender su nación del atraso, la ignominia y la barbarie haitiana que sedienta de sangre nos apabulló con su poderío económico y militar, pero nunca sucumbimos.

Los haitianos son seres humanos, cierto, tienen necesidades cierto, pero nosotros los dominicanos no somos los culpables ni los causantes de su desgracia. En muchas ocasiones nos hemos quitado el pan de la boca para dárselos a ellos.

Señores, el caso de los haitianos en este país no es cosa de juego. Hay que buscar la manera de frenar esa invasión pacifica a la que nos tienen sometidos y cada día ocupan más poblados, mas barrios, mas zonas y la tapa al pomo se la pusieron con el concierto del domingo pasado en la Plaza España de la Zona Colonial donde su eslogan era “Lo logramos, somos un solo país”.

Esto lo escribo con responsabilidad porque quiero dejar plasmado que con esta situación lloraremos lágrimas de sangre y mucha sangre de inocentes correrá, porque los haitianos no entienden que su país está de aquel lado de la frontera y que este es el nuestro y no lo vamos a ceder a ningún precio.

Los hemos acogido con gesto de buena voluntad, pero ellos se han aprovechado y actuando con la mala fe que los ha caracterizado históricamente, han ocupado posiciones que los está volviendo petulantes, arrogantes, desafiantes y les advertimos que los dominicanos no aguantaremos mucho eso y cuando las pasiones se desborden entonces ellos volverán a sentir el peso del brazo del general Antonio Duvergé y de este pueblo que se siente ya harto, amenazado, desplazado de los puestos de trabajo, acorralado en una imposición que va a traer problemas entre los dos pueblos.

Soy dominicano y me duele mi país, para los que vendrán a contradecir, no soy xenófobo, ni anti haitiano perce, anti ningún pueblo o nacionalidad, pero esto de los haitianos ya nos tiene hasta el copete.

Los dominicanos conocemos la ingratitud de los haitianos, autoridades, poder político y económico, lo han manifestado en toda la existencia pues nos han invadido con las armas desde el mismo día en que fueron liberados del yugo colonial francés.

El primer acto bochornoso lo encabezo el agresor genocida de los dominicanos Tousaint Louverture, que bajo el argumento de recuperar esta parte que estaba en manos de Francia, nos invadió con una fuerza descomunal bajo el cinismo y la sonrisa traidora que los caracteriza.

Haití, ha sido siempre una espina clavada en la médula de la República Dominicana, una desgracia que cada vez que toma alguna fuerza el único camino es hacia el Este, ahora, como en el pasado no pudieron con las armas, se han aliado con potencias, con intereses encontrados con nosotros y bajo una campaña maldita y descarada han pretendido poner de rodillas la República Dominicana y llenar nuestro territorio con más de 2 millones de haitianos indocumentados, portadores de enfermedades que ya el país había erradicado, epidemias muy peligrosas, nos han quitado el empleo en la construcción, la agricultura, el turismo y en las conserjerías.

Le hemos brindado universidades para prepararles los profesionales que luego de graduados no vuelven a su país sino que se quedan medrando aquí y la mayoría se va a los Estados Unidos, Canadá o Francia. Es el caso del Instituto Superior de Agricultura (ISA), donde el 90% de los estudiantes son haitianos, lo mismo sucede en el politécnico de Dajabón, nuestras escuelas están llenas de niños haitianos sin documentos y que hasta se niegan a cantar el Himno Nacional y los hospitales gastan el 20% de su presupuesto en atender las parturientas haitianas como sucede en los hospitales de Santiago, Mao, Santiago Rodríguez y en este último caso traen niños nacidos en el otro lado de la frontera y con ayuda de ONGs los inscriben en los libros de registro de los hospitales como nacidos aquí.

Expongo estos pareceres, porque son míos propios. Estoy indignado con el problema de los haitianos y de las autoridades que lo han permitido.

El Director de Migración, tienen un aliado indolente e inepto, apadrinando todo eso y desde el gobierno se nota una especie de dejar hacer cómplice, y nos dicen con descaro que la frontera es incontrolable y entonces no sabemos para que tenemos la guardia rascándose aquello de las entrepiernas en campamentos y cuarteles sino sirven ni para cuidar nuestro país.

El caso es que tenemos que colegir en que hemos tenido una permisividad en el Estado, en los políticos de toda laya, en los empresarios que ven más sus negocios que el país.

Caramba Duarte, donde fue que te dejamos botado, donde quedaron tus doctrinas, tu accionar por la Patria, los indiferentes y traidores te enarbolan en las fiestas patrias desempolvando frases ya gastadas pero que apadrinan todas estas sinverguenzadas.

COMMENTS

  • Rosita Arena

    Es triste ver un país pequeño,,que ha sufrido tantas calamidades naturales,,donde la población es tan pobre ( el país más pobre de occidente),,como es el pueblo de Haiti,,invadir a su vecino país República Dominicana en busca de oportunidades,de trabajo,studio y supervivencia q su gobierno corrupto no les da,,la culpa la tiene el gobierno,,Deverian unirse los dos países en uno solo una República Dominicana,,una sola isla,,yo creo q sería la mejor opción,,unidos serán más fuerte.

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